Llevaba desde diciembre y parte de este año meditando si publicar esta entrada o no hacerlo... Y bueno, qué mejor momento para publicarlo que ahora; el año pasado por estas fechas sucedieron los hechos que aquí se describen. Además, este año sólo me pasaré por su página de Facebook como mera lectora... Sí, me apetece leer comentarios positivos, bonitos, ñoños, dulces, "muero de amores", que con las películas navideñas aún no tengo bastante empacho.
Tras acabar los exámenes quise dedicar este espacio a todo lo sucedido durante el Black Friday del año pasado con la tienda oficial de Iron Fist España; sin embargo, tras escribirla y quedarme a gusto, fui postergando su publicación. En realidad, se redactó para contestar a mi Anamifga, ya que no quiso leer lo que le respondí por el motivo que narraré más adelante y para quedarme, como ella, igual de a gusto; empero, tengo algo muy claro: en mis anteriores entradas, excepto en una y ya se conoce de sobra la causa, nunca he arremetido contra las personas que trabajan en Iron Fist España. Es decir, me he quejado de sus ofertas, de sus precios, de que en su página de Facebook sólo esté aceptada la encomiástica, pero nunca jamás me he metido o acusado a ninguna persona en particular ni en general... Sin embargo, esta señora sí que me acusó de hechos que no son ciertos. En lugar de plantear el problema como algo general o evadir dicho problema excusándose y pasando del tema para no crear controversia (como hacen los Community Manager de las demás tiendas), escribe tanto pública como privadamente que soy una chica agresiva que falta el respeto... Nunca me he metido con ninguna persona, sólo con la marca, con la tienda y con los precios. De entrada, ya se ve qué clase de persona eres, querida.
Quien quiera entender lo que aquí se expondrá, deberá leer antes aquella otra entrada titulada: Querido Iron Fist España, ahora es más personal que nunca.
Por cierto, querida, aquí emplearé el "tono" (como tú lo defines) que me dé la gana, puesto que este es mi blog y dista muchísimo de lo que leíste en tu página de Facebook.
Tras acabar los exámenes quise dedicar este espacio a todo lo sucedido durante el Black Friday del año pasado con la tienda oficial de Iron Fist España; sin embargo, tras escribirla y quedarme a gusto, fui postergando su publicación. En realidad, se redactó para contestar a mi Anamifga, ya que no quiso leer lo que le respondí por el motivo que narraré más adelante y para quedarme, como ella, igual de a gusto; empero, tengo algo muy claro: en mis anteriores entradas, excepto en una y ya se conoce de sobra la causa, nunca he arremetido contra las personas que trabajan en Iron Fist España. Es decir, me he quejado de sus ofertas, de sus precios, de que en su página de Facebook sólo esté aceptada la encomiástica, pero nunca jamás me he metido o acusado a ninguna persona en particular ni en general... Sin embargo, esta señora sí que me acusó de hechos que no son ciertos. En lugar de plantear el problema como algo general o evadir dicho problema excusándose y pasando del tema para no crear controversia (como hacen los Community Manager de las demás tiendas), escribe tanto pública como privadamente que soy una chica agresiva que falta el respeto... Nunca me he metido con ninguna persona, sólo con la marca, con la tienda y con los precios. De entrada, ya se ve qué clase de persona eres, querida.
Quien quiera entender lo que aquí se expondrá, deberá leer antes aquella otra entrada titulada: Querido Iron Fist España, ahora es más personal que nunca.
Por cierto, querida, aquí emplearé el "tono" (como tú lo defines) que me dé la gana, puesto que este es mi blog y dista muchísimo de lo que leíste en tu página de Facebook.